DRONES MILITARES

Los drones o también conocidos como vehículos aéreos no tripulados (UAV, por sus siglas en inglés) son aeronaves que se controlan a distancia, lo que elimina la necesidad de que un piloto esté a bordo durante un vuelo determinado. En la vida civil, los drones son algo común y apenas pasará una semana antes de que pongas tus ojos en uno.

Tienen una gran variedad de aplicaciones que van desde ser un simple hobby hasta su uso creciente en fotografía profesional y cinematografía, inteligencia, mapeo, reconocimiento y búsqueda de objetivos, además de ser utilizados en misiones de rescate.

Sin embargo, es su uso en operaciones militares lo que nos interesa hoy. En realidad, la tecnología comenzó en el ejército y hoy en día hay varios tipos de drones militares que harán volar tu mente.

Los UAV se pueden utilizar para vuelos autónomos, basados en planes de vuelo preprogramados o mediante la ayuda de sistemas de automatización dinámica más complejos. Es bueno apreciar el creciente papel de los sistemas de aviones no tripulados (UAS) en la resolución de ciertos conflictos y la ejecución de ataques de alto perfil.

Este artículo explorará una breve historia del uso de drones en aplicaciones militares y las diversas categorías de drones militares en función del tamaño, su uso y su complejidad.

UNA BREVE HISTORIA DEL USO DE DRONES EN OPERACIONES MILITARES.

El nombre drone se deriva originalmente de la abeja macho, que se caracteriza por un zumbido específico que es bastante profundo y, a veces, molesto. Este podría haber sido un escenario similar para los drones iniciales, pero los drones modernos han evolucionado y el rasgo principal que les dio nombre (el zumbido) es apenas perceptible. Es por eso que la industria prefiere llamarlos ahora Vehículos aéreos no tripulados.

La idea de tener un avión no tripulado, nació durante la Primera Guerra Mundial cuando los Estados Unidos y Francia estaban trabajando en el desarrollo de un avión automático. Al final, Francia fue la que logró armar este tipo de artilugios. El dispositivo se llamó biplano Voisin BN3 y pudo volar aproximadamente 100 km.

El interés por desarrollar vehículos aéreos no tripulados aumentó aún más durante la Segunda Guerra Mundial cuando varias partes sufrieron grandes pérdidas ocasionadas por los aviones de reconocimiento. El mal giro de los eventos origino la necesidad de desarrollar vehículos aéreos no tripulados para evitar mayores efectos perjudiciales.

En realidad, la primera vez que se usaron drones para observación fue en 1973, durante la Guerra de Vietnam. Sin embargo, en el mundo moderno, los UAV tienen mucho sentido, especialmente en el campo de batalla. Son muy convenientes ya que no tienes que preocuparte por desplegar personas detrás de las líneas enemigas, ya que nadie estará a bordo en caso de que el dispositivo se destruya.

Hay que decir que los especialistas en este campo prefieren usar el término Sistemas de aviones no tripulados, ya que un UAV suele ser parte de un sistema hecho de:

uno o más aviones no tripulados destinados a la observación: están equipados con una serie de sensores,
Estaciones de control terrestres: son la base del sistema, controlan los drones y reciben datos de los sensores.
La conexión de radio que se establece entre los drones y las estaciones de control terrestre.

La FAA ha adoptado el acrónimo UAS - Unmanned Aircraft System, para agrupar los complejos sistemas que incluyen estaciones terrestres y otros elementos además de los vehículos aéreos.

CATEGORÍAS DE LOS DRONES MILITARES.

Los vehículos aéreos no tripulados en el ejército generalmente se clasifican en función de su peso, rango, velocidad, así como sus capacidades específicas.

La clasificación que se describe a continuación es la misma utilizada por las compañías de la OTAN.

CLASE I (<150 drones="" font="" kg="" micro="" mini="" o="" peque="">

Hay varios tipos de aviones no tripulados de Clase I que se pueden usar en las soluciones de Comunicación e Información de Control de Comando Computarizado ISTAR que es Inteligencia, Vigilancia, Adquisición de Objetivos y Reconocimiento. Podría tener micro, mini o pequeños drones en las categorías de Clase I.

Un buen ejemplo de un micro dron en la Clase I es el micro-UAV de ala fija FULMAR que tiene un peso máximo de despegue de aproximadamente 20 kg. Fue desarrollado por Thales y Wake Engineering y tiene una duración de 12 horas y un alcance de aproximadamente 90 km.

La velocidad máxima de este UAV es de 100 km / h la altitud máxima que puede alcanzar es de 4000 m con una carga útil de 8 kilogramos. Puede integrar fácilmente las soluciones de vigilancia marítima y terrestre de Thales.

Este avión no tripulado suele ser lanzado por una pequeña catapulta con una red de recuperación y se puede desplegar desde tierra o desde la cubierta de un barco. Le sorprenderá su corto tiempo de despliegue de solo 30 minutos y su capacidad para aterrizar en el agua.

CLASE II (150-600 KG): TÁCTICO

Los UAV tácticos están diseñados especialmente para ser utilizados en el nivel de batallón orgánico o en fuerzas especiales como activos para fines de vigilancia de alcance medio.

Tienen el papel vital de llenar el vacío entre las gamas de funciones de los micro-UAV de corto alcance y los UAVS estratégicos, que forman parte de MALE y HALE. Estos drones logran esto al tener una combinación de flexibilidad, resistencia y robustez.

Han sido de utilidad en el análisis y conocimiento de situaciones, para ofrecer protección y vigilancia, además de usarse en la adquisición de objetivos y en la evaluación de algunos daños a una fuerza determinada.

El sistema ISTAR táctico más sofisticado en todo el mundo en este momento es el Watchkeeper, desarrollado por Thales. También es el mayor programa de UAS en Europa. De hecho, la plataforma Watchkeeper es el único UAV de gran tamaño en Europa que está certificado para volar en el espacio aéreo civil y esto incluye las áreas urbanas.

CLASE III (> 600 KG): ESTRATÉGICA

Los vehículos aéreos no tripulados de clase III se denominan generalmente sistemas MALE de resistencia larga y mediana, así como vehículos aéreos no tripulados de alta altitud, HALES. Los MALE son especialmente ideales para la vigilancia, así como el reconocimiento en un área no amenazante.

Tienen una amplia gama de aplicaciones que se utilizan para determinar la posición del enemigo o el movimiento de ciertas poblaciones que no están involucradas en un conflicto. Tienen una infraestructura de vanguardia y también se han utilizado para compilar listas de objetivos.

Algunos MALE de renombre incluyen el Reaper / Predator, y la familia de drones llamados Anka y Heron, solo por nombrar algunos. Uno de los pocos HALE disponibles en este momento es la familia Global Hawk.

CLASIFICACIÓN BASADA EN FUNCIONES

Los UAV también pueden clasificarse según los roles específicos que deben desempeñar en determinadas operaciones militares. Basado en esto tenemos los siguientes UAVs:

Los UAV objetivo y señuelo: se pueden usar para proporcionar artillería aérea y terrestre a un objetivo que simula un misil o avión enemigo.
UAV de reconocimiento: se utilizan para proporcionar inteligencia en el campo de batalla.
UAV de combate: se han utilizado para proporcionar capacidad de ataque para algunas misiones de alto riesgo.
Los UAV de investigación y desarrollo se han utilizado para desarrollar aún más las tecnologías de UAV que se pueden integrar en los UAV que se han implementado en el campo.
Los UAV civiles y comerciales son aquellos que han sido diseñados para ser utilizados en aplicaciones civiles y comerciales.

CLASIFICACIÓN BASADA EN LA AUTONOMÍA DE LOS UAVS.

Los vehículos aéreos no tripulados también podrían clasificarse según su autonomía, ya que los más avanzados apuntan a una autonomía total. Esta clasificación hará que los UAV se agrupen en diferentes generaciones en función de sus capacidades autónomas. La mayoría de los primeros UAV se denominaban drones, ya que no eran tan sofisticados como un simple avión controlado por radio.

Fueron controlados con la ayuda de un piloto humano que a veces se conoce como operador. Algunas de las versiones más sofisticadas tienen sistemas de control y guía incorporados para ayudarles a realizar algunas tareas de piloto humano de bajo nivel. Dichos deberes incluyen la velocidad y la estabilización de la trayectoria de vuelo, así como las funciones de navegación simplemente prescritas, solo para nombrar algunas.

Sobre esta base, la mayoría de los primeros UAV no pueden considerarse autónomos debido a su total dependencia del control humano. De hecho, el campo de la autonomía es un campo emergente en los UAS y su función crucial para ayudar a los militares a tener la tecnología lista para el campo de batalla debe ser mejorada. Esta tecnología de autonomía es vista como algo que se espera que se tenga en cuenta en el diseño de futuros UAVs militares. Existe la siguiente clasificación para UAVs que utilizan tecnología de autonomía:

Fusión de sensores: estos UAV combinan información obtenida de diferentes sensores para que sea usada por el vehículo.
Los UAV de comunicación: ayudan en el manejo de la comunicación y la coordinación entre múltiples agentes cuando la información es incompleta e imperfecta.
Planificación de movimiento, también conocida como Planificación de ruta: estos UAV ayudan en la determinación de una ruta óptima para el vehículo en caso de que encuentre ciertos obstáculos.
UAV de generación de trayectoria: estos UAV tienen la capacidad de determinar una maniobra de control óptima para seguir un camino determinado o ir de una ubicación determinada a otra.
Asignación y programación de tareas: estos UAV tienen la capacidad de determinar la distribución óptima de varias tareas entre un grupo de agentes especificados en el caso de que existan limitaciones de tiempo y equipo.
UAV tácticas cooperativas: tienen la capacidad de formular una secuencia óptima, así como una distribución espacial de algunas actividades entre varios agentes con el objetivo de optimizar o maximizar la probabilidad de éxito para una misión en particular.

El nivel de autonomía abre la posibilidad de UAV independientes que podrían razonar como un ser humano: un UAV inteligente. Esto puede ser comparable al desarrollo de sistemas de inteligencia artificial como se vio en los años 80 y principios de los 90 en varios campos.

El objetivo final de la tecnología de autonomía es desarrollar un sistema que reemplace al piloto humano. Pero el progreso en el desarrollo de esta tecnología, así como su utilidad, estará muy influenciado por el clima político que rodea a tales eventos.

EN CONCLUSIÓN

Los vehículos aéreos no tripulados continúan siendo aplicados en diferentes operaciones militares debido a su alta conveniencia para reducir las pérdidas y permitir la ejecución de misiones de alto perfil.

Su origen se remonta a la Primera Guerra Mundial cuando los Estados Unidos y Francia tuvieron la idea de desarrollar un avión que no tenía un piloto humano a bordo, para ser utilizado en la guerra. Aún así, la primera vez que se usaron fue durante la Guerra de Vietnam.

Los UAV forman parte de un gran sistema al que se hace referencia como sistema de avión no tripulado, un término que abarca todo el sistema con el control en tierra y los sensores que se tienen en cuenta.

Como se vio, hay varias clases y la separación se basa en pesos, rango de control y resistencia. Los UAV militares también pueden clasificarse según el tipo de operaciones que realizan: objetivo y señuelo, reconocimiento, tanto para combate como para investigación y desarrollo.

El objetivo es crear un dispositivo inteligente que ya no requiera el factor humano. Sin embargo, por ahora, la tecnología no llegó tan lejos. Se ha predicho que los sistemas de aviones no tripulados desempeñarán un papel vital en la resolución de conflictos futuros y se están desarrollando sistemas más avanzados a tal efecto.

Fuente: mydronelab.com

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